Sé tu mismo.

El truco está en no pensar en el "¿qué dirán?". Simplemente, haz lo que te apetezca. Que nadie cambie tu forma de pensar, hablar, vestir, etc. ¿Qué más da si no les gustas? Que no te miren. Eres como eres, y eres perfecto/a así. La gente que te quiere, te seguirá queriendo aquí y en la otra punta del mundo, contenta o triste, con ropa de marca o con vaqueros y una camiseta vieja, con el pelo liso o encrespado. Así que ya sabes: sé tu mismo/a, y que le den a los demás.